Mel Gibson inicia el rodaje de La resurrección de Cristo con un nuevo Jesús y un elenco totalmente renovado
Han pasado más de veinte años desde que La pasión de Cristo estremeciera al mundo con su crudeza mística y su lenguaje de martirio. Ahora, Mel Gibson retoma aquella llama con La resurrección de Cristo, una secuela largamente gestada que por fin ha iniciado su rodaje, y lo hace con un reparto completamente renovado. El papel de Jesús ya no recaerá en Jim Caviezel, sino en el actor finlandés Jaakko Ohtonen, cuya presencia serena y física promete un Mesías más terrenal, más humano y menos iconizado.
El rodaje ha comenzado en los legendarios estudios de Cinecittà en Roma, pero el alma visual del film se despliega en los escenarios naturales del sur de Italia —Matera, Altamura, Ginosa, Gravina y Laterza—, paisajes de piedra y polvo que vuelven a transformarse en la Judea del siglo I. Gibson ha apostado por una producción de gran escala, con decorados colosales y una narrativa que desborda los límites del texto bíblico, persiguiendo una experiencia sensorial y espiritual antes que una mera reconstrucción histórica.

En el elenco figuran también Mariela Garriga, actriz cubana que encarnará a María Magdalena con una mezcla de pasión y redención; Kasia Smutniak como María, Pier Luigi Pasino en el papel de Pedro, Riccardo Scamarcio como Poncio Pilato y Rupert Everett, cuyo personaje se mantiene en secreto, acaso reservado para una figura alegórica o demoníaca.
Gibson ha descrito su nueva obra como «un viaje ácido entre lo espiritual, lo visual y lo simbólico», alejándose del relato lineal para penetrar en zonas más enigmáticas del mito cristiano: la caída de los ángeles, el descenso al infierno, el tránsito por el Sheol. La película no se limitará a narrar la resurrección, sino que la expandirá como un fenómeno cósmico y psicológico, un espejo entre lo divino y lo humano.
Producida por Icon Productions y distribuida mundialmente por Lionsgate, la cinta se estrenará en dos partes: la primera el 26 de marzo de 2027, coincidiendo con el Viernes Santo, y la segunda el 6 de mayo de 2027, durante el Día de la Ascensión.
Con este regreso monumental, Mel Gibson vuelve a situarse como el gran apóstol del cine bíblico contemporáneo, dispuesto a escandalizar y a fascinar a partes iguales. La resurrección de Cristo se perfila no solo como una continuación de su anterior pasión, sino como una visión febril donde la fe se mezcla con el mito y el cine se atreve, una vez más, a mirar de frente el misterio.