Martyn Ford, el culturista más gigante del mundo
Así se alimenta el culturista gigante Martyn Ford, un armario empotrado de dos metros y más de 120 kilos de peso, que está haciendo carrera en el cine y la televisión.
Martyn Ford es un culturista gigante, de unos dos metros de altura y más de 100 kilos de puro músculo. Y gracias a su físico increíble ha logrado el papel de Goliat en la serie de televisión ‘House of David’. Pero… ¿cómo come un tipo tan grande como él para mantener esos músculos tan impresionantes?
La serie ‘House of David’ es un drama histórico sobre la vida de David, el personaje de La Biblia. Y Martyn Ford interpreta al gigante Goliat, al que David mata con una piedra lanzada por una onda. Y para este papel ha tenido que comer muchísimo, increíble la cantidad de calorías que puede ejercer al día.
Su dieta suma unas 10.000 calorías y su alimentación no se basa en nada de ultraprocesados ni comida basura, solo comida real y rica en macro y micro nutrientes. «La comida y la nutrición para mí son super importantes. Nunca subestimo su importancia y para ganar volumen y músculo hay que comer muchísimo. No hay que perder el respeto a la comida. No hay que comer calorías vacías, pues te harán subir de peso, pero mal, y te dejarán unos niveles de energía horrendos.
Mucho pollo, pescado y proteínas de todo tipo, así es la dieta de Martyn Ford
Los alimentos que más come son: pescado, pollo, ternera, huevos, avena, arroz, batatas, frutas, verduras, nueces, semillas, aceite de oliva virgen extra… «No hay nada de ciencia espacial en mi dieta, es todo muy básico y como siempre con sentido común». Para desayunar, por ejemplo, bebe mucha agua y toma huevos, frutas y avena. Los huevos siempre enteros. Y, en ocasiones, claras de huevo.
Para el almuerzo no come pasta, pero sí pollo, salmón y bacalao como fuentes de proteínas; batata, arroz y ternera. Y para la cena evita los procesados, y como no cuenta macros, es un gran defensor de la suplementación. A esta hora prioriza las proteínas sobre los hidratos de carbono o las grasas buenas.
