Scarlett Johansson desnuda en Ghost in the Shell
Fue uno de los estrenos mĆ”s anticipados del aƱo. En sus diversos y variados trĆ”ilers, vislumbramos ecos de Blade Runner, Matrix, Tron y, por supuesto, una fuerte influencia de Ghost in the Shell. Ahora regresa a la palestra para valorar si merece ser revisitadaā¦
Una de las grandes incógnitas que suscitaba el filme era quĆ© parte del extenso corpus narrativo de la obra original servirĆa de hilo conductor en la pelĆcula. Finalmente, esta nueva adaptación nos presenta una historia relativamente original que recupera varios elementos de la obra de Masamune Shirow, con un marcado Ć©nfasis en dos arcos argumentales principales: el primer film de anime de hace 22 aƱos y partes de la segunda temporada de Stand Alone Complex 2nd GIG.

Ambientada en una versión futurista del aƱo 2029, la trama de esta reinterpretación de Ghost in the Shell se centra en La Mayor/The Major (Scarlett Johansson), una comandante hĆbrida entre cyborg y humana, integrante de un grupo operativo conocido como Sección 9, dedicado a combatir a hackers y terroristas cibernĆ©ticos. En esta ocasión, el equipo se enfrentarĆ” a un enigmĆ”tico criminal anónimo que busca destruir a Hanka Robótica, la compaƱĆa lĆder en avances de cibertecnologĆa. Sin embargo, durante su misión, nuestra protagonista descubrirĆ” un oscuro secreto detrĆ”s de los motivos del nuevo villano, lo que la llevarĆ” a cuestionarse su verdadera identidad.
Sin duda, la mayor dificultad de esta adaptación radicaba en consensuar lo que se querĆa narrar en las dos horas de metraje habituales del cine. Satisfacer a los fanĆ”ticos de la obra original, pero al mismo tiempo ser innovadores, fueron los pilares fundamentales para sostener este nuevo proyecto. Al final, debemos decir que han salido airosos, ya que la pelĆcula es lo suficientemente original como para sorprender durante su desarrollo, pero tambiĆ©n creemos que cuenta con detalles y homenajes suficientes para contentar al fan mĆ”s acĆ©rrimo del famoso manga. Por ejemplo, en la pelĆcula seremos testigos de varias secuencias memorables de la cinta del 95, adecuadas para el nuevo formato.
Lo mejor es que su director ha captado con maestrĆa la estĆ©tica del anime, logrando secuencias memorables que recrean en imagen real todo lo que nos cautivó de los trabajos anteriores. Visualmente, la producción es un prodigio que se deleita en su esencia, desplegando en pantalla los recursos visuales que siempre han caracterizado a Ghost in the Shell. La tecnologĆa actual ha permitido logros que antes eran impensables. AdemĆ”s, la acción y las coreografĆas han sido tratadas con esmero y planificación previa, minimizando el uso de montaje y evitando los cortes continuos que tanto perjudican al cine de acción.
Lamentablemente, la pelĆcula no es perfecta y quizĆ” peca de un ritmo algo torpe, sin llegar a definirse ni como una pura pelĆcula de acción ni como una obra pausada y con doble lectura, tĆpica de la ciencia ficción. La planificación y el enfoque escogido pedĆan un gĆ©nero predominante de ‘blockbuster’ al estilo de las obras de Marvel, es decir, puro entretenimiento y espectĆ”culo visual. En cambio, la obra original posee un ritmo mĆ”s pausado y una esencia y mensaje mucho mĆ”s profundos y reflexivos, que aquĆ no han sido adecuadamente plasmados ni en el guion, ni en la dirección, ni en las interpretaciones. Warner ya sufrió un revĆ©s con Batman v Superman por no saber dónde situar la obra, y parece que Ghost in the Shell repite el mismo error.

La pelĆcula tiene muchos altibajos que se resienten notablemente en varios momentos. De comenzar con una secuencia increĆble, pasamos a una parte en la que el ritmo decae rĆ”pidamente, con apenas algunos destellos esporĆ”dicos. Posteriormente, el ritmo vuelve a subir, aunque vuelve a caer y no repunta sino hasta el Ćŗltimo acto, cargado con toda la acción y tensión que se omitió previamente. Con esto, el filme termina siendo un poco pesado en su parte central, algo que nunca deberĆa ocurrir en este tipo de cine con un enfoque tan claramente comercial.
En cuanto a la ambientación, nuevamente resalta la enorme dedicación con la que los diseñadores han creado y reimaginado esta versión futurista de la Tierra, haciendo justicia a la obra de Shirow-sensei. El mundo de Ghost in the Shell se siente tecnológico y muy avanzado, aprovechando la época en la que vivimos para basar muchos de sus conceptos.
Concluimos con un apartado polĆ©mico: nuestra protagonista. Scarlett Johansson se muestra fĆsicamente sublime, a pesar de no contar con las facciones asiĆ”ticas que parte del pĆŗblico demandaba. Ver a Johansson enfundada en el traje es un deleite para los sentidos y uno de los grandes logros de la pelĆcula, pero, (siempre hay un pero), parece que la actriz no ha captado la esencia principal del personaje, resultando en una Motoko Kusanagi muy distinta a la conocida. No es que el resultado nos haya parecido terrible, pero quizĆ” no nos ha atrapado como deberĆa.
En resumen, una obra interesante que agradarÔ a los espectadores pacientes, pero que puede aburrir a aquellos que buscan mÔs acción y menos diÔlogo.